En busca de lucro y no del abastecimiento de la población hondureña, el gobierno, mascarando sus verdaderas intenciones, ha tomado nuevas medidas para asegurar la soberanía alimentaria.
La escasa divulgación de las indagaciones serias sobre el origen de la pandemia, forme parte del mismo dispositivo de pensamiento y de acción que disparó la propagación de este virus, aumentando más preguntas que respuestas.
Mientras la humanidad lucha por encontrar la cura contra un virus que la ha derrumbado su economía, la industria agroalimentaria fabrica el próximo virus, igual o más letal que el actual.
La mayoría de microbios en el suelo son beneficiosos para los seres humanos porque regulan el clima de la tierra. Sin embargo un aumento de ellos podría llegar a ser devastador, trayendo una crisis económicas y de hambruna.
El debate acerca de nuestra relación con la naturaleza, y el efecto catastrófico que hemos venido ejerciendo sobre el medio ambiente, se ha expandido y profundizado.