La campaña se enfoca en brindar soluciones a tres problemas centrales que han surgido por el COVID-19: la desconfianza, la estigmatización de ciertos sectores y la falta de medidas dirigidas directamente a los sectores rurales, en especial en la agricultura familiar y de subsistencia.
Durante este tiempo los hondureños y hondureñas hemos mostrado que somos fuertes, que somos capaces de vencer la adversidad, y por eso la campaña “Catrachos Imparables” refleja la actitud que tenemos como pueblo, nos identifica a todos y nos brinda medidas de prevención que nos ayuden a seguir adelante.
Mensaje
Bajo el mensaje ¡Nada nos para! Seguiré cuidándome para producir alimentos saludables, la iniciativa persigue reforzar la actitud proactiva y de fuerza que tenemos como país, poniendo énfasis en mantenernos alerta con el cuidado personal, en el trabajo, en las parcelas y en todo espacio de reunión.
Mensajes como este son necesarios porque debemos perder el miedo a vivir con el virus, tenemos que generar confianza, reconociendo y aplaudiendo el rol del sector rural que se han mantenido firmes en la producción de alimentos.
También debemos promover información fidedigna y adecuada para que se puedan tomar las medidas de prevención apropiadas.
Actualmente los sectores campesinos e indígenas dedicados a la agricultura familiar, de subsistencia o de comercio local están quedando aislados de las medidas impulsadas por el Gobierno, el cual está favoreciendo mayoritariamente al sector agroexportador, pero el consumo de frutas, granos y verduras en el país depende en gran medida de estos pequeños agricultores, por lo que ANAFAE busca apoyarlos con estas y otras acciones.
Dentro de los productos de la campaña se encuentran manuales de prevención para empresas agrícolas, faenas y trabajo en el campo; material para líderes comunitarios y comunidades de fe; libros para colorear con niños y niñas para que aprendan de manera lúdica sobre cómo protegerse del COVID-19 y material para pulperías, escuelas, centros de salud y otros para llegar a la mayor cantidad de gente en el sector rural.
Catrachos Imparables
La campaña se muestra heroica, generando esperanza y seguridad con sus mensajes, con lo que se espera que la gente tome medidas de prevención e integre prácticas seguras en su trabajo en el campo y en sus espacios de convivencia.
Sobre los productos de comunicación elaborados, estos abordan a diversos públicos:
- Afiches: para reforzar las medidas de prevención y eliminar el estigma. También para explicar el uso adecuado de mascarillas.
- Desplegables: dirigido a jóvenes para enseñar sobre medidas de prevención y evitar la discriminación.
- Guía de prácticas agrícolas responsables: orientada a apoyar a las empresas, cooperativas, grupos campesinos e indígenas y a todo trabajador vinculado al sector rural para adoptar medidas de prevención y protección en el trabajo y personales.
- Libro de colorear: enfocado en niños y niñas para que aprendan medidas de prevención de manera lúdica.
- Bifolio para lideresas y líderes comunitarios y comunidades de fe: con el fin de orientar prácticas a adoptar en la comunidad, en reuniones y otros.
Redes sociales
En redes sociales la campaña busca reducir el miedo y realizar incidencia al comparar el COVID-19 con otros problemas que enfrenta Honduras, tales como la corrupción, la violencia y otros, ya que el enfoque informativo del virus está invisibilizando otros problemas sociales que son igual de apremiantes en Honduras.
Los diseños muestran la problemática del COVID-19 y la comparan con otros problemas sociales, demostrando que la pandemia provocada por el virus aún es menor con respecto a la vulneración de derechos humanos en el país.
Objetivo
Al culminar la campaña se aspira a que las personas mantengan las medidas de prevención frente al COVID-19 y se tenga un entendimiento más profundo de la situación, reduciendo la estigmatización y generando confianza.
También se espera que las personas no olviden que Honduras requiere de muchos cambios sustanciales para poder hablar de una “nueva normalidad”, ya que fenómenos como la corrupción y violencia siguen presentes, no habiendo algo “nuevo” en este aspecto.